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Remedios caseros para combatir enfermedades comunes

A pesar que que durante el embarazo cuidamos más nuestra salud y vigilamos nuestra alimentación, lo cierto es que podemos experimentar algunas enfermedades o infecciones como resfriados o catarros sobretodo en invierno y en otoño.

Por suerte, existen numerosos remedios caseros que pueden ayudarte a sentirte mejor durante estos días, teniendo en cuenta que la medicación en nuestro caso está muy limitada, y solamente te los recetará tu médico en caso de que sea muy necesario.

Aquí tienes una relación de remedios caseros que te ayudarán a combatir determinadas enfermedades y molestias durante el embarazo y reforzarán muchos de ellos, tu sistema inmunológico y el del bebé.

Resfriado

Resfriarse durante el embarazo no va a perjudicar al bebé, aunque nosotras estaremos bastante más molestas. Teniendo en cuenta que solamente durará alrededor de una semana, no puedes medicarte si no es porque te lo haya recetado tu médico.

Algunos remedios caseros para aliviar las molestias son realizar baños de vapor con menta, eucalipto o manzanilla cubriéndote la cabeza con una toalla. También puedes hervir un litro de agua y añadirle una cucharada de bicarbonato y después inhalarlo.

Tomar abundante líquido es uno de los mejores remedios y si es caliente mejor. Prueba con la manzanilla o un té caliente y añade a este último unas rodajas de jengibre, miel y limón. Mantenerse hidratado es muy importante durante la gestación.

Duerme con una almohada extra y hazte lavados nasales con frecuencia.

Sinusitis

Padecer una sinusitis durante el embarazo puede ser muy molesto, ya que por norma general se tiene congestión nasal, presión en la cara, dolor de cabeza y secreciones nasales.

Aunque deberás acudir a tu médico y seguir las instrucciones que te indique, también puedes echar mano de algunos remedios caseros para aliviarla.

Es importante que te hagas lavados nasales con alguna solución salina. Puedes prepararla tú calentando una taza de agua caliente y añadiendo una cucharada de sal que tendrás que diluir completamente. Aspíralo por la nariz con fuerza.

También puedes machacar una cebolla y seis rábanos y extender esta pasta en una gasa que pondremos sobre los senos durante media hora. Ponerse toallas calientes en la cara durante 10 minutos también te ayudará.

Dolor estomacal

A veces pueden tener lugar algunos dolores o molestias estomacales. Recuerda que en este caso siempre debes acudir a tu médico para que pueda examinar el por qué de lo que te sucede. Una de las causas más frecuentes suele ser el nivel de progesterona que tenemos durante el embarazo, que hace que nuestro intestino vaya más lento.

Una de las opciones es beber agua con zumo de limón y sal. Un té de frambuesa también es una buena opción.

Si lo que tienes es estreñimiento, consume bastante fruta por la mañana y mézclala con un yogur probiótico como Actimel por ejemplo, que además ayudará a aumentar tus defensas y reducir las molestias digestivas durante el embarazo que pudieran surgirte más adelante.

Dolor de cabeza

Los cambios hormonales suelen ser los causantes de los dolores de cabeza durante el embarazo, sobretodo al principio. Además aumenta la circulación sanguínea y tienes menos glucosa en sangre. Si ya padecías jaquecas o migrañas antes, es posible que se acentúen durante la gestación.

Intenta comer varias veces al día para que no te quedes sin azúcar y coloca compresas frías en la frente para aliviar el dolor. Acuéstate hacía el lado izquierdo y si es posible que estés a oscuras. Bañarse con agua tibia también puede ayudarte a que te sientas mejor.

 

 



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