Hay mujeres que aprovechan la etapa del embarazo para comer a su antojo sin cuidar el aumento excesivo de peso. Piensan que, total, ya adelgazarán después de dar a luz. Sin embargo, el sobrepeso y la obesidad aumentan las complicaciones que puedan surgir a lo largo de los nueve meses y también en el momento del parto.
Controlar el peso durante el embarazo es importante para tu bebé pero también para tí
Algunos estudios sugieren que los adipocitos o células grasas de los obesos son muy diferentes en su estructura de las de personas con normopeso. Los investigadores han analizado muestras de tejido adiposo o graso de un grupo de personas delgadas y las han comparado con otras de personas gruesas.
El resultado indica que las células grasas que pertenecían a este último grupo presentaban ciertas deficiencias y mostrabanresistencia a la insulina (problema que puede suponer un estado prediabético). De este modo, se incrementaban notablemente todas las enfermedades relacionadas con la obesidad: hipertensión, diabetes, sedentarismo, procesos cardiovasculares, complicaciones musculoesqueléticas…
Por eso, futura mamá, no engordes más de lo que te sugiera tu médico. Cuida tu salud y también tu línea. Además, así, cuanto ya tengas a tu bebé, volverás a recuperar tu figura mucho antes.