El ejercicio más aconsejado es el paseo diario, de unos 30 minutos, con luz natural y con ropa y calzado cómodos. No debemos renunciar a esta sana costumbre, salvo por imperativos meteorológicos o porque el médico así lo indique por alguna razón.
El ejercicio más aconsejado es el paseo diario, de unos 30 minutos, con luz natural y con ropa y calzado cómodos. No debemos renunciar a esta sana costumbre, salvo por imperativos meteorológicos o porque el médico así lo indique por alguna razón.